La causa se atribuyó a que los conductores no respetaban las normas de seguridad en la explotación minera y sus alrededores. Para resolver el problema, el socio telemático utilizó datos de vehículos FMS extraídos de camionetas Toyota Hilux para averiguar qué había detrás de los accidentes.
Anteriormente, nuestros ingenieros habían extraído datos estándar de los vehículos, como el consumo de combustible, las revoluciones por minuto, el kilometraje y el nivel de combustible. Aunque estos datos podían utilizarse para analizar el comportamiento de los conductores, su finalidad principal era optimizar las operaciones.
Nuestra tarea no era pequeña, ya que teníamos que identificar nuevos parámetros para mejorar los conocimientos sobre el comportamiento al volante y los sistemas de seguridad. Durante la exploración de nuevos tipos de datos de vehículos, nuestro equipo se encontró con dos retos importantes. A pesar de tener acceso a datos de camionetas, descubrimos que la red CAN bus de los vehículos del mercado sudamericano difería de la europea. Para encontrar rápidamente una solución, nuestros ingenieros recurrieron a la asistencia remota para determinar cómo y dónde obtener los datos ADAS de técnicos ajenos a nuestra empresa. Como señala nuestro jefe, Zsolt Nagy, este proceso fue similar a una cirugía a distancia, en la que un cirujano controla unos brazos robóticos desde una distancia de miles de kilómetros.
Se recopilaron datos en tres áreas clave (asistente de aviso de salida del carril, asistente de frenada de emergencia y control de crucero adaptativo) para reducir los accidentes. El análisis ampliado facilitó la identificación de los conductores que no conducían con seguridad, lo que permitió a la empresa impartirles formación y se tradujo en una reducción significativa de los accidentes.
En reconocimiento a esta fructífera colaboración, se nos ha adjudicado otro contrato para obtener los parámetros ADAS de otro vehículo.